En este tiempo de Cuaresma, quiero proponeros la pieza gregoriana más apropiada para estos días: Attende Domine.
El tiempo litúrgico de la Cuaresma nos prepara para la celebración de la Pascua: es un tiempo de conversión y penitencia; y una gran ocasión para la meditación y la purificación.
Attende Domine es una recreación del salmo 50, pero no dirigido a Dios Padre, sino directamente a Cristo, que ha cargado con nuestros pecados sobre sus espaldas para así darnos la paz y el perdón.
La celebración de la fiesta de San Blas en Carrión de los Condes se desarrolla en el monasterio de Santa Clara. El día 3 de Febrero la Comunidad de las Clarisas convoca a los carrioneses que quieran acercarse al monasterio y renovar la devoción al obispo francés San Blas.
A la celebración de la eucaristía le sigue el momento de «Besar las Reliquias» del santo patrón que protege de los males de la garganta. Sus reliquias se recogen en un viril plano que el sacerdote da a besar y en un rollo que pasa por la garganta.
Tras esos momentos de oración, se sale fuera del templo y comienza la parte festiva del acto y que se denomina «Rodar la Naranja». Este acto se realiza actualmente en el suelo empedrado delante de la iglesia pero fuera de la valla.
Una vez rodada la naranja se merienda dicha fruta y/o se pasa a la tienda del Convento para adquirir los hojaldres que llevan el nombre y la forma de «Cuellos de San Blas».
Ojalá que San Blas nos enseñe no solo a cuidar nuestra garganta, sino también nuestras palabras, lo que decimos, para que realmente lo dicho sea más hermoso que el silencio.
Tema publicado con la autorización de «Susana Melero»
Pedro se acercó y le dijo: «Señor, ¿cuántas veces tengo que perdonar a mi hermano las ofensas que me haga, hasta siete veces? Jesús le dijo: «No te digo hasta siete veces, sino hasta setenta veces siete». (Mateo 18, 21-22)
Leí en una ocasión que los seres humanos, al igual que los cuerpos celestes, describimos órbitas elípticas en nuestras relaciones, con momentos de máxima cercanía y de alejamiento. ¡Qué bueno sería asumir esto como lo natural y cuántas fricciones nos ahorraríamos! Bien pensado,ambas posiciones son necesarias: acercarse para nutrir lo entrañable y también alejarse, para redibujar la propia singularidad y tomar distancia de los conflictos que, vistos en perspectiva, pierden muchas veces intensidad y dramatismo. Acercarse y distanciarse…con armonía y naturalidad…como en una danza.
En la distancia crece también la capacidad de reconciliación y , con ella, la posibilidad de tender puentes de nuevo, permitiendo que la memoria rescate las experiencias valiosas y se selle la paz.
No hay lastre más pesado que el del rencor. Perdonarse o perdonar es, sin duda, la mayor experiencia de liberación. Nos humaniza y diviniza a la vez, convirtiéndonos en canales de la misericordia del Padre.
Obra: Busto de Juan Pablo II; autor: Cándido Pazos; lugar: Plaza de la Inmaculada, Santiago de Compostela; año: 2011
He caminado por las proximidades de esta escultura incontables veces; me he sentado muy cerca contemplando el sol de media mañana o las flores que la rodean en primavera; he observado la cara norte de la catedral con sus diferentes rostros ambientales … Pierdo la cuenta de las fotos que he sacado a su silueta al atardecer. Sin embargo, estas son las primeras fotografías que tengo de ella.
En qué consiste: es una experiencia integral de «evangelización en salida». Encontramos a los peregrinos del «Camino de Santiago», en el «camino» y les indicamos «El Camino», Jesucristo
Este mes quiero presentaros una pieza del Códice Calixtino, «O adiutor omnium”, la cual fue atribuida a un autor recurrente entre las piezas del citado manuscrito: se trata del obispo Atton de Troyes.
Este obispo, fue salvado por Santiago de un naufragio cuando regresaba de Jerusalén. Posteriormente, sabemos que se retiró a Cluny en 1145 y falleció en torno a ese mismo año.